Los quesos son considerados maduros después de un mínimo de 9 meses, durante los cuales se conservan en un ambiente y situaciones óptimas para de esta manera obtener la perfección de sabor y textura característico dentro de cada clase. Estos aportan calcio, fósforo, zinc y vitamina A en mayor cantidad que la leche, al igual que sal. Pero, ¿Qué cantidad de grasa contienen en comparación con los demás quesos?
Casi el total de los quesos madurados se clasifican dentro de los semi-grasos, los que contienen de un 25 % a un 45% de grasa dentro de su composición total. Mientras que los frescos están dentro de los desnatados, los cuales contienen menos de un 10% de grasa. De todos modos hay que comerlos con moderación pues su consumo excesivo puede favorecer la elevación del colesterol malo en la sangre.
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