¡Qué maravilloso son los inicios de año! 365 días (bueno, ya un poquito menos) repletos de posibilidades, como un lienzo en blanco se extienden ante cada uno, dándonos la oportunidad de replantearnos, reinventarnos y establecer nuevos hábitos y propósitos.
Pero una vez te planteas nuevos proyectos y metas es aún más fantástico poner manos a la obra. En una entrada anterior escribí acerca de mis propósitos de año nuevo y en lo que se refiere a la salud ya he tomado el sartén por el mango. Aunque todavía no he ido al médico para cierto seguimiento pendiente, me siento diferente, pues he tomado en serio mi alimentación y actividad física, haciendo caso omiso a los dolores, a la pereza y al desánimo por no ver resultados a la velocidad de la luz (mi gran problema) asumiendo el mantra que sin darme cuenta ha definido mi vida: no rendirme, pues lograr cosas maravillosas realmente toma tiempo y esfuerzo.
Me he propuesto ser una mejor versión de mi misma en todo el sentido y en el plano de la alimentación y el ejercicio he decidido - ¡y ejecutado!- volver a viejos hábitos saludables pero con una visión menos radical y más flexible.
En términos de nutrición me la he tomado últimamente con la quinua. En "posts" previos he compartido información sobre este fantástico cereal y para no dejarlo sólo en teoría he desarrollado sabrosas recetas con este, tan ricas como esta ensalada. A mi amiga Alina le fascina, después de fotografiarla para ustedes no ha parado de prepararla una y otra vez, y mi padre cada vez que me ve, en especial cuando viene a mi casa, siempre me pregunta si no me queda por ahí un poquito de esa "cosa" que le di a probar el otro día.
Ensalada de quinua negra y menta
Ingredientes
- 4 Cdas de aceite de oliva
- 1 Cebolla mediana cortada en cuadritos
- 1 Diente de ajo
- 2 Tazas de caldo de vegetales bajo en sodio o agua
- 1 Taza de quinua negra enjuagada
- Sal
- Pimienta
- 1 Cda de vinagre de vino blanco
- ½ Cdita de azúcar
- 1 Taza de guisantes cocidos y escurridos
- ½ Taza de almendras tostadas sin sal opcional
- 1 Taza de hojas de menta frescas
- ½ Taza de queso feta para servir
Elaboración paso a paso
- Pon a calentar a fuego medio dos cucharadas de aceite de oliva y sofríe la cebolla. Cuando empiece a ponerse transparente agrega el ajo picadito y cocina un poco más.
- Adiciona el caldo o el agua, rectifica la sal y sazona con la pimienta. Cuando empiece a hervir incorpora la quinoa y deja cocinar tapado hasta que absorba el líquido. Reduce el fuego, remueve y cuece hasta que la quinoa está blanda. Deja refrescar.
- Combina la quinoa, esponjando un poco con un tenedor, con el aceite de oliva restante, el vinagre de vino blanco, el azúcar, los guisantes, las almendras y la mitad de las hojas de menta.
- Sirve con trocitos de queso feta y el resto de las hojas de menta.
Notas
Nutrition
Dr. lopez dice
Gracias por la recomendación de la quinoa, he buscado opciones para no comerla sola, saludos le envia la doctora del glods gym...
Sagrario/ LaSraBonita dice
Holaaaaaa, estas recetas con quinua que están en mi página te van a encantar, son fáciles y son muy ricas ¡un abrazo!