Lo básico: Perteneciente a la familia de las euforbiáceas, este arbusto con raíces en forma de tubérculo comestible, es la base alimentaria (cocida, pues el tubérculo y las hojas crudas de algunas variedades pueden resultar tóxicas) de millones de personas en continentes como América, Asia y África. La yuca, llamada mandioca o guacamote en algunos países latinos, es rica en carbohidratos, pobre en grasas y proteínas, es conocida por su facilidad de preparación y característico sabor.
En qué te ayuda: Aporta, vitaminas del grupo B, calcio, hierro - contiene cantidades extraordinarias de este mineral - y vitamina C. Es una fuente excelente de magnesio, el cual hace falta para proteger los huesos, el corazón, las arterias y también para controlar la presión arterial. A nivel dietético puede favorecer el alivio de jaquecas y colaborar para reducir los niveles de colesterol. No obstante el consumo de yuca puede ralentizar la función tiroidea.
Formas de prepararla: Fuera de las formas tradicionales de consumo: casabe, arepitas, pastelones, frita, en puré, también puede ser apreciada en la tapioca, la harina hecha a partir de la yuca, rica en calorías, sumamente digerible, recomendada en casos de afecciones digestivas por su efecto emoliente sobre la mucosa digestiva y en la convalecencia posterior a enfermedades graves e intervenciones quirúrgicas.
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