1Barra de mantequilla sin salde 100 gr bien fría cortada en cuadritos
1Cda de agua helada
2Cdas de aceite de oliva
1Cda de mantequilla
3Cebollas blancas grandes cortadas en julianas
Sal
Pimienta
2Ramitas de tomillo fresco + adicional para servir
4Huevos
¼Taza de leche entera o crema de leche
2Tazas de queso fontinapuedes usar danés también
2Cdas de queso parmesano rallado
Elaboración paso a paso
En el tazón del procesador o en un bol con un tenedor mezcla la harina con la sal, el azúcar y la mantequilla, hasta que tenga una consistencia terrosa. Adiciona el agua helada y amasa un poco hasta formar una masa. Reserva por lo menos 10 minutos en el congelador, envuelta en papel adhesivo.
Pasado este tiempo, extiende la masa sobre una superficie enharinada. Corta redondeles y coloca sobre moldes pequeños para tartaletas, presiona los bordes con el bolillo, para cortar el exceso de masa, pincha el fondo de la masa con un tenedor y hornea a ciegas (el fondo cubierto con papel antiadherente y haciendo peso con habichuelas, arroz o pesas para este fin), y hornea por 20 minutos en un horno precalentado a 375° Fahrenheit (190° Celsius), pasado este tiempo elimina el papel y las pesas y hornea por 5 minutos más hasta que esté ligeramente dorada. Saca del horno y reserva.
En una sartén calienta el aceite de oliva junto a la cucharada de mantequilla. Sofríe las cebollas hasta que estén bien doradas. Sazona con sal y pimienta y hojitas de tomillo fresco. Reserva.
Combina en un bol los huevos con la leche (o crema de leche) y sazona con sal y pimienta.
Esparce las cebollas y el queso fontina equitativamente sobre las tartaletas y rellena cada una con un poco de la mezcla de huevos. Espolvorea con un poco de queso parmesano y hornea por 20 minutos. Reduce la temperatura del horno a 325° Fahrenheit (160° Celsius) y cuece por 40 minutos o 50 minutos más, hasta que el huevo esté cocido y la superficie esté ligeramente dorado. Sirve tibio o a temperatura ambiente, espolvoreando un poco de hojas de tomillo.
Notas
"Puedes introducir el molde con la masa por lo menos 10 minutos en el congelador antes de hornear, para conseguir que la tarta quede más crocante."